Oscar
Muñiz
Lo
sucedido en Perú, cuando por una u otra razón existen derrames de crudo de petróleo,
los responsables por lo general evitan salir al frente para encarar la situación.
Siempre existe la estrategia de la “leguleyada” administrativa, la acción irresponsable
y hasta cobarde de no dar la cara. La otra actitud es responsabilizar a un tercer
responsable imaginario, o a un hecho fortuito.
Es así
como en Perú se trata estos asuntos, donde se sabe que la ley no llega, que las
responsabilidades penales o administrativas para ciertos personajes son puro
cuento. En el Perú, por lo general la ley cae sobre el más débil y
desprotegido. Este es el caso de los derrames de crudo de petróleo en los dos
primeros meses del presente año.
En
enero-2016 en el distrito de IMAZA, ubicado en provincia de Bagua, departamento
de Amazonas (Bajo Utcubamba), se produjo un derrame de crudo de petróleo debido
a la ruptura del Oleoducto Norperuano que está a cargo de la empresa estatal de
petróleo Petroperú, derramando más de 2,000 barriles.
Al
siguiente mes de febrero-2016 se registró otro derrame de crudo de petróleo en
el distrito de MORONA, provincia de Datem de Marañón, departamento de Loreto, derramando
más de 1,000 barriles de crudo de petróleo.
El Organismo
de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA) comprobó que el oleoducto
Norperuano no se encuentra en buen estado. Esta situación pone en riesgo
evidente a las poblaciones nativas, muchas de ellas asentadas en sus
territorios de su propiedad, pero que son usufructuados por la empresa
petrolera con su oleoducto.
Hasta
el actor Leonardo DiCaprio se pronunció alarmado recién enterado de lo sucedido
“Al menos dos devastadores derrames de petróleo han ocurrido en la amazonia peruana en el último mes, derramando
miles de barriles de petróleo en los ríos amazónicos. La compañía nacional de petróleo
de Perú (Petroperú) es responsable, sin embargo siguen operando, mientras que
estos derrames continúan afectando a las comunidades indígenas y locales. Únete
a mí y quienes pedimos a la empresa limpiar el derrame y cuidar de todas las
zonas afectadas”.
Los
efectos inmediatos en la población nativa han sido la dermatitis, la faringitis
y bronquitis. En la localidad de Mayuriaga, unas 100 familias son las afectadas,
la ayuda no llega en la localidad de Morona (Loreto) y esta situación se agrava
desde el 3 de febrero 2016.
Exigimos
a Petroperú, al gobierno regional de Loreto y al gobierno central la inmediata solución
de los problemas para las comunidades nativas.
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